mi amigo Mincho está en India, recorriendo el Ganges, es una de esas especies en extinción, un tipo de esos que da "buen rollito instantáneo". Me escribe este mail que no he podido dejar de copiar y pegar aquí para vosotros bloggers de la Tierra Pura y Tripulantes de pro... muy pronto... espero andar yo también tripulando por las aguas de varanasi... :
Era domingo y me tocaba descanso de mis clases de yoga y percusion.Estaba radiante de energia y charlaba sin descanso con mi amigo Jean Michel,un sommelier frances perdido por la India con el que mantenia una buena conexion desde que nos habiamos conocido en el "Yogi Lotge",el hostalito que compartiamos.
Caminabamos por la orilla del Ganges de Varanasi disfrutando de un dulce paseo hasta el Assi Ghat,la ultima escalinata de la ciudad.De ahi planeabamos alargar el paseo hasta lel "Monky Temple",un templo repleto de monos al buen estilo del"Libro de la Selva".
-Se me ocurrio montar un restaurante.-Me contaba mi buen amigo frances-Me empenye hasta las cejas y luego empenye a mi hermano en aquel proyecto.trabaje como un esclavo para conseguir mi gran suenyo:un restaurante de mi propiedad...Luego todo fracaso.Los bancos se repartieron los pedazos.Fueron tiempos muy duros.
-Tuviste suerte,Jean,-le contestaba.-Probablamente te hubieras convertido en un ricachon insoportable con un ego inmenso.De los fracasos aprendemos mas que de los exitos...
Ahi andabamos filosofando sobre cuantos fracasos habiamos necesitado para encontrarnos en aquel momento alli,buscando en la India el sentido de nuestras vidas.Habiamos dejado atras el rio y nos encontrabamos atravesando una de tantas calles abigarradas de polvo y trafico,cuando se me ocurrio parar ante el mostrador de un especie de farmacia-drogueria que nos salio al paso.
El encargado,un sij de metro noventa con su tipico turbante blanco y su gran mostacho de puntas peinadas hacia arriba, estaba apoyado en la tarima de azulejo desconchado del mostrador,concentrado en algun evento especial que estaba ocurriendo en las alturas.Automaticamente Jean y yo seguimos con nuestra mirada el hilo que sujetaba con sus manos y que ascendia hasta introducirse entre el denso cableado del tendido electrico.Alli le perdiamos la pista pero,con la experiencia que ya teniamos sobre el trasiego de la ciudad,imaginamos al momento lo que habia al final del hilo:una cometa.
El farmaceutico siguio un buen rato manipulando la tanza,absorto en el espacio infinito, mientras nosotros esperabamos pacientes y nos preguntabamos como demonios habia conseguido aquel tipo traspasar la maranya de cables con su cometa.El, solo se percato de nuestra presencia cuando,en un nefasto momento, el hilo se rompio de improviso.
-Buenas tardes,-pude comentar al fin.-Tendria un cepillo para las unyas?
El sij me escaneo de arriba a abajo sin darse ninguna prisa.
-Tienes las unyas muy negras.-Me respondio con toda confianza,olvidado ya el desastre de su juguetito volante.
-Es la polucion de la ciudad.-Afirme con cierta sorpresa.
Eso es lo que pensais todos los turistas cuando venis a este pais.Que la India es muy sucia, se mete en vuestras unyas y se pega a vuestra blanca y delicada piel...Pero la realidad es otra.
-Y cual es esa realidad?-Pregunte lleno de asombro.
-Que la India limpia los corazones de todos los que venis de occidente.Lo cierto es que el negro de tus unyas no viene de afuera.Te sale de dentro.
Al final no le compre el cepillo;pero a la vuelta Jean y yo le regalamos una magnifica y colorida cometa de las especiales de diez rupias.
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